WASHINGTON.-El crecimiento económico de Estados Unidos cayó a un mínimo de casi dos años el último trimestre, mientras que la inflación saltó a niveles incómodos, interrumpiendo una racha de fuerte demanda y débiles presiones sobre los precios que habían alimentado el optimismo sobre un aterrizaje suave.
El Producto Interno Bruto (PIB) aumentó a una tasa anualizada del 1,6%, por debajo de todas las previsiones de los economistas, según la estimación inicial del Gobierno.
El aumento del déficit comercial fue el que más restó al crecimiento desde 2022, según refieren las estadísticas.
El informe de la Oficina de Análisis Económicos mostró el jueves que la inflación subyacente, medida de cerca, avanzó a un ritmo superior al previsto del 3,7%, la primera aceleración trimestral en un año.
Los bonos del Tesoro cayeron y el S&P 500 abrió a la baja, y los operadores retrasaron el momento esperado del primer recorte de tasas de interés de la Reserva Federal para finales de este año.
Con el repunte de la inflación, las autoridades de la Reserva Federal pueden enfrentar una presión renovada para retrasar aún más cualquier recorte e incluso considerar si los costos de endeudamiento son lo suficientemente altos.
Se espera que la FeD mantenga las tasas de interés en un máximo de dos décadas cuando se reúnan la próxima semana.
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