Redacción/elCorreo.do
SANTO DOMINGO: Encabezados por su dirigente Jesús Núñez, un grupo de braceros que trabajan en campos de cañas de diversas industrias azucareras del país, protestaron este martes frente a la sede de la Dirección General de Migración por las repatriaciones de que son objeto muchos de sus compañeros nacionales haitianos.
“Sin cañero no hay azúcar”, era la consigna del grupo de trabajadores de la caña, desde distintas zonas productivas de República Dominicana, por entender como abusiva las medidas migratorias tomadas por el organismo con braseros que entiende indocumentados.
Entre las reivindicaciones que los trabajadores de nacionalidad haitiana exigen se encuentra la solicitud de apertura de un plan de regularización “para beneficio de los cañeros que tienen residiendo en el país más de 50 años”.
Igualmente, Núñez afirmó que existen 379 cañeros pensionados a los que le han sido suspendidos sus pagos en la Dirección General de Jubilaciones y Pensiones porque no tienen la cédula dominicana.
Según sus alegatos, a estos en el año 2015 Migración les entregó residencia permanente, más no envió el listado a la Junta Central Electoral para que la misma les certifique residencia y entregue cédula y que por lo mismo,hace dos años desde que los pensionados no reciben bonificación.
“Estamos exigiendo, también, que se detenga la deportación de trabajadores cañeros, específicamente en los ingenios como central Romana e ingenio Caei y AFD”, agregó Núñez.
