Ministerio de Educación anuncia la conclusión del año escolar atípico y marcado por altibajos a causa de la pandemia

Redacción/elCorreo.do
SANTO DOMINGO: Luego de meses de afanes, improvisados en ocasiones y trata de que la pandemia del coronavirus afectara lo menos posible a estudiantes y profesores, terminó oficialmente este jueves 29 el año escolar 2020-2021.
Con grandes inversiones, el ministerio de Educación procuró que los educandos mantuvieran el ritmo de enseñanza, aunque a distancia, mediante la impartición de clases del innovador sistema de educación virtual.
El proceso terminó con altas y bajas, cuestionamientos a procedimientos, una fuerte deserción escolar especialmente de los sectores sociales de menores ingresos, con lo que siguen quedando atrás en el aprendizaje.
El año escolar se inició el dos de noviembre de 2020 y las autoridades dispusieron una serie de medidas para garantizar “la salud e inclusión” con el plan “Educación para todos Preservando la Salud”.
La docencia se inició de manera progresiva en los distritos con menor índice de contagio, con estudiantes de secundaria, y luego los alumnos de los niveles inicial y primaria.
Posteriormente también se incorporaron los de Educación en Adultos y los estudiantes de educación especial.
A los fines de asegurar la calidad de la enseñanza y la comprensión de los alumnos, la institución licitó dispositivos electrónicos para los docentes y los estudiantes, procesos que fueron y siguen siendo cuestionados e incluso algunos de ellos impugnados.
Un considerable porcentaje del presupuesto elaborado para implementar el nuevo sistema de enseñanza, se contrató la transmisión por Televisión, radio de clases a un costo de RD$5,000 millones.
Los libros de texto fueron sustituidos por cuadernillos, elaborados por el propio Minerd, con el apoyo técnico y financiero de USAID y Unicef.
La alimentación
Otro aspecto básico fue que el Estado, a través del Instituto Nacional de Bienestar Estudiantil (INABIE), garantizó la alimentación de al menos 1,850,000 estudiantes con edades de entre los 5 y los 19 años, entregando kits de comidas crudas cada semana a los padres y tutores.
Hubo de esperarse el mes de abril para el inicio del proyecto piloto de regreso a las aulas en 48 municipios que en ese momento registraban una tasa de positividad de COVID-19 menor del 5 por ciento.
Con el lema “Cuidando la alegría y la seguridad del reencuentro” se volvió a las aulas y en mayo se intentó incluir a todos los municipios del país, pero hubo de suspenderse por el rebrote del virus y seguir con las clases virtuales a distancia.
Pero pese a todas esas vicisitudes, el ministro Roberto Fulcar ha considerado que el período escolar que ahora termina constituyó una gran experiencia, de la cual “salimos adelante con la educación”.
El optimismo de Fulcar se basa en que “no hubo interrupción en el ciclo educativo de los estudiantes, implementamos nuevas herramientas que enriquecen el aprendizaje y vencimos el pesimismo de quienes no creían que era posible una educación de calidad en medio de la pandemia”.