
Redacción/elCorreo.do
SANTIAGO: Una epopeya histórica que tuvo como escenario hace 177 años la capital del Cibao, Santiago, la Batalla del 30 de Marzo, es conmemorada este martes en lo que fuera el teatro de las acciones bélicas, con un programa de actividades encabezadas por la por la vicepresidenta de la República, Raquel Peña, oriunda de esta provincia.
La Batalla del 30 de Marzo, fue una gesta patriótica en contra los invasores haitianos, once días después de la Batalla del 19 de marzo, escenificada en Azua, al sur del país..
Las actividades se iniciaron pasadas las 8:00 de la mañana con el izamiento de la bandera e interpretación del Himno Nacional en el parque Imbert, a cargo de la banda de música de la segunda brigada del Ejército de la República Dominicana.
Junto a la vicepresidenta participan altos mandos militares, el presidente del Senado, Eduardo Estrella, también nativo de Santiago, representantes del ministerio de Educación, el presidente de la Comisión de Efemérides Patria, Juan Pablo Uribe y autoridades sanatiaguenses.
Los héroes de la Batalla
La Batalla del 30 de Marzo, fue encabezada por los generales José María Imbert y Fernando Valerio, donde el ejército independentista de reciente formación, venció nuevamente al ejército haitiano, el cual había invadido la República tras su derrota en la Batalla de Azua.
El 30 de marzo de 1844, los haitianos atacaron y fueron enfrentados por el general Imbert y el comandante Achilles Michel, frente a la sabana de Santiago
El 27 de marzo de ese mismo año, el general y comandante de operaciones en Santiago, José María Imbert, fue llamado por la Junta de Gobierno dominicano con el propósito de que organizara el contraataque a los haitianos.
Imbert atrincheró la ciudad, construyó fosos y tomó precauciones importantes para ganar una batalla junto al comandante Achilles Michel, quien dirigió junto a otros compatriotas a los que adiestró en el dominio de las armas, la batalla del 30 de marzo de 1844, en Santiago; construyó los fuertes “Dios”, “Patria” y “Libertad” en los que fueron vencidos los haitianos.
Se hizo acompañar de los oficiales Pedro Eugenio Pelletier, Ángel Reyes, Román Franco Bidó, Gaspar Polanco Borbón, José Nicolás Gómez, Fernando Valerio, José M. López, Lorenzo Mieses, Dionisio Mieses, Toribio Ramírez, Marcos Trinidad López, entre otros.
La derrota de los adversarios haitianos fue recibida con alegría, luego de que las huestes criollas, comandadas por el general José María Imbert, resistieran cinco ataques, por dos flancos, en los que los invasores tuvieron unas 600 bajas y una mayor cantidad de heridos.
Se cuenta que el general Imbert, empleó el ardid de comunicarle al general haitiano, Jean Louis Pierrot, que el presidente de Haití, general Charles Herard Ainé, había muerto el 19 en Azua, y que no valía la pena seguir sacrificando vidas humanas con el presidente muerto. Pierrot consideró que debía partir de inmediato a su país para hacerse cargo del poder. La mentira funcionó.
El triunfo de las armas dominicanas no fue la labor de un hombre, ni siquiera de un solo comandante; más bien resultó un esfuerzo colectivo, entre los que se destacan Matías Ramón Mella, José María Imbert –nombrado el 27 de marzo como comandante supremo de las tropas de Santiago- José María López, Francisco Antonio Salcedo (Tito) y Fernando Valerio.
El presidente de Haití, general Charles Riviere Herrad Ainé, salió de Puerto Príncipe el 10 de marzo con una fuerza militar de 30,000 hombres que dividió en tres flancos para penetrar a la nación recién proclamada como independiente del yugo haitiano: el primero estaba al mando del general Jean Louis Pierrot con 10,000 hombres que entrarían por el norte, por Dajabón, para tomar Santiago y Puerto Plata.
El segundo dirigido por el propio Herrad, pretendía tomar San Juan de la Maguana y Azua, y el tercero dirigido por el general Souffront debía entrar por Neyba.
En esta batalla, el general Imbert, al mando de una parte del ejército del norte, derrotó al general Pierrot, quien comandaba las tropas del ejército haitiano en una relación numérica superior a su favor.
Santiago fue el escenario donde se llevó a cabo el segundo enfrentamiento entre dominicanos y haitianos luego de ser proclamada la Independencia Nacional.