
Redacción/elCorreo.do SANTO DOMINGO: A raíz de la denuncia de que vehículos asignados a altos oficiales de las Fuerzas Armadas habían sido retenidos a generales de la Fuerza Aérea Dominicana, causó gran revuelo en ese segmento castrense. Posteriormente el comandante general de esa institución, mayor general Leonel Muñoz Noboa, desmintió la acción, asegurando que se trató “de un mal entendido que se originó cuando un miembro de la Contraloría General de la República confirmó el retiro de los vehículos a los oficiales”. Sin embargo, el mayor general retirado Rafael Betances Nivar, quien es presidente del Instituto de Generales y Almirantes de las Fuerzas Armadas en Retiro (IGAFAR), denunció que sus miembros de la Fuerza Aérea (FARD) fueron convocados para entregar los vehículos que tienen asignados, por una supuesta orden de “la procuradora Yeni Berenice Reynoso”. De inmediato, ésta lo desmintió. Ante el citado incidente, investigadores periodísticos de los asuntos militares han acudido a consultar la Ley Orgánica de las Fuerzas, la que en su artículo 160 refiere que los generales y almirantes en honrosa situación de retiro serán merecedores de las siguientes compensaciones por años de servicios: -Permiso para licencia de porte y tenencia de armas de fuego cortas -Compensación por defunción familiar y servicio médico integral. Hacen notar que las asignaciones de vehículos no se encuentran entre las reivindicaciones que, por el servicio prestado, pero que la costumbre ha devenido considerándose legal. Uno de los periodistas que se ha especializado en estos asuntos es el reportero Julián Herrera, del periódico digital Acento.com. En un reportaje al respecto, Herrera afirma que “la apropiación ilegal de vehículos de las Fuerzas Armadas comprados con dinero público, ha sido una práctica recurrente de una parte del generalato en todos los gobiernos de los últimos 20 años”. “Ministros, comandantes generales, viceministros, directores de cuerpos especializados y de otras entidades de las Fuerzas Armadas, en su momento compraron vehículos que a su salida de la posición no los devolvieron a la institución”, precisa. Cita el caso de un ex jerarca militar, al que no identifica, que defiende la devolución del vehículo que tuvo asignado cuando desempeñaba el cargo de dirección. “Los militares, sin importar el rango, somos servidores, nos pagan con el dinero de los contribuyentes, con el mismo que se compran vehículos y otras propiedades. No estamos por encima de la ley; cuando me pensione me llevo lo que está estipulado en la Ley Orgánica militar, lo demás es una mala práctica que debe ser corregida,” añadió la fuente del comunicador. Significa que la mala práctica a la que hace referencia la fuente “afectan los presupuestos militares, ya que cada dos años las instituciones tienen que comprar nuevas flotillas de vehículos para asignarlos a los oficiales que sustituyen en el puesto a los anteriores, porque los salientes no los devuelven a las instituciones”. Considera que esas son las anomalías que la auditoría que realiza la Contraloría General de la República (CGR) a la Fuerza Aérea de la República Dominicana (FARD) está llamada a corregir. Refiere que actualmente “unos 60 vehículos están en manos de generales retirados de la Fuerza Aérea, que, en su mayoría, usufructúan sin la debida asignación de la Comandancia General”. Aclara que si bien muchos de los vehículos tienen hasta 20 años de uso, también los hay de años recientes como 2015, 2018 y hasta del 2020. “La auditoría procura recuperar y regular las propiedades militares que están en manos de oficiales retirados y activos, pero que les dan un uso particular”, explica Herrera. En su investigación, comprobó que el arqueo, según fuentes de la Contraloría General, se hará en todas las instituciones y entidades de las Fuerzas Armadas, incluyendo al Ministerio de Defensa. Indica que en el caso de los actuales generales y coroneles activos de las FARD, éstos usan sus propios vehículos para realizar labores de la institución, “porque una parte de los comprados en los últimos 20 años, están en poder de oficiales retirados”. Observa que las Fuerzas Armadas no han comprado vehículos para sus oficiales que ocupan puestos de mando o dirigen entidades, al menos durante el año y cuatro meses del gobierno de Luis Abinader. |