Macarrulla decide dar un paso al frente ante hervidero sobre supuesta vinculación en negocios con la PGR de Jean Alain Rodríguez

Redacción/elCorreo.do
SANTO DOMINGO: Luego de varios días de un intenso cuestionamiento con pedidos de renuncia incluidos, el ministro de la Presidencia, Lisandro Macarrulla, decidió este lunes dar un paso al frente y tratar de acallar las voces que le vinculan a negocios con la gestión del encarcelado exprocurador general de la Republica, Jean Alain Rodríguez.
Sin aludir a los pedidos de licencia o dimisión del cargo, Macarrulla señaló que está dispuesto a defender su honorabilidad en el terreno de la legalidad y el debido proceso.
Afirmó que las versiones obedecen a una campaña de difamación e injuria en su contra, además de supuestamente pretender desviar las acciones que contra la corrupción lleva a cabo la Procuraduría General de la República.
Denunció que con falaces las acusaciones para involucrar a la empresa de su familia en operaciones fraudulentas vinculadas a la construcción de la nueva cárcel de La Victoria.
En su opinión, que esa campaña de descrédito ha sido financiada y ejecutada por sectores políticos interesados en empañar la gestión que realiza el gobierno, y que “instrumentalizando las legítimas aspiraciones de justicia que tiene la sociedad dominicana, quieren generar un clima de distracción mediática que desvíe la atención ciudadana de la lucha contra la corrupción que realiza la Procuraduría General de la República”.
El ministro y empresario aseguró que a lo largo de su vida, todas sus actuaciones públicas y privadas han sido hechas con transparencia, verticalidad y honradez, y que con esos mismos principios se manejan las empresas de su familia.
Y afirmó que está dispuesto a someterse a cualquier escrutinio en ese sentido.
“Por años, he servido a mi país como empresario comprometido con los mejores intereses de la nación y no permitiré que sectores políticos interesados en dañar y empañar la gran obra de gobierno del presidente Luis Abinader desmeriten y pongan en entredicho mi dignidad y honorabilidad», informó Macarrulla.
Agregó que está dispuesto a demostrar “las calumnias en el terreno de la legalidad y el debido proceso, que los rumores que han sido vertidos en mi contra en los últimos días son absolutamente falaces y no podrán mancillar, como se pretende, mi honor y el de mi familia, ni desestabilizar el rectilíneo curso de la transparencia y la decencia del Gobierno Constitucional de nuestra República”.
La reacción del funcionario se relaciona con la mención que aparece de una de sus empresas como parte de los contratados para realizar trabajos en la construcción de la nueva cárcel, cuyo monto ha sido considerado exagerado.
Después de esa mención, las redes sociales han estallado reclamando la renuncia del funcionario o que tome una licencia mientras se dilucida el tema.
Una de las voces más activas en ese sentido ha sido la de Ramón Alburquerque, dirigente del Partido Revolucionario Moderno (PRM), quien ha considerado que con Macarrulla se debería aplicar la misma reacción que tuvo el Gobierno con la entonces ministra de la Juventud, Kimberly Taveras.
Alburquerque también reclamó a Milagros Ortiz Bosch, directora de Ética e Integridad Gubernamental, la misma diligencia que tuvo con Taveras o con el suspendido director del Instituto Agrario Dominicano, Leonardo Faña.
Sobre el pedido de Alburquerque, Ortiz Bosch emitió este lunes la siguiente declaración:
“Es extraño que conociéndonos por tantos años Ramón Alburquerque me pida hacer con tanto atraso lo que hace cuatro meses hice: Visitar en su despacho del Palacio Nacional al ministro Lisandro Macarrulla para tratar el mismo tema que preocupa Ramón.
Fui recibida respetuosamente. Se trató el tema con profundidad, le expliqué mi obligación de tratar el rumor público de entonces. El ingeniero Macarrulla saludó nuestro interés y con transparencia tratamos el caso.
En ese entonces ya estaban en curso las investigaciones, que hoy se hicieron públicas, por el órgano llamado constitucionalmente a realizarlas, por lo que trascendía los límites de la DIGEIG como lo establece el decreto 486/12.
La diferencia de ahora, Ramón, es que entendimos hace 6 años porqué salimos del PRD a construir el PRM.
Ramón Alburquerque debe saber que soy y seré la misma senadora que él conoció, que nunca renuncia a su deber.
Es realmente extraña tu coincidencia con los que con los que quisieran desmeritar las tareas que realizamos desde el mismo instante en que llevamos a la justicia el caso del denominado “hormigón asfáltico caliente”. Milagro Ortiz Bosch no volverá al pasado. Hace 6 años que salí”.