Carlos Nina GómezPerspectiva

Dejen trabajar a la Junta

Por Carlos Nina Gómez

Colaboración/elCorreo.do

PERSPECTIVA: La Junta Central Electoral (JCE), sin miedo a nada -y mucho menos a críticas que puedan llegar de la dirigencia política más rancia e incomprensible-, tiene que seguir su trabajo. En especial el trabajo concerniente a la organización de las próximas elecciones presidenciales, congresuales y municipales pautadas para el tan esperado año 2028.

En ese sentido realizar su labor sin tregua porque de esa manera cumplirá con su delicado rol que es el de solidificar la democracia que tanta sangre le costó al pueblo dominicano y a sus más calificados patriotas.

Lo más importante, en todo este delicado proceso que protagoniza el órgano colegial, se observa en el jurista Román Jáquez Liranzo como presidente de la JCE. Es el referente a que Jáquez Liranzo nunca entra en disquisiciones con gente cuya misión es «entorpecer» la democracia que se vive en República Dominicana.

Precisamente, y en coincidencia con el tema que abordo en este artículo, el veterano periodista Nelson Encarnación, en un trabajo escrito en su columna que publica en este diario, expuso esto: «Resulta que estas organizaciones realizan actividades propias de un proceso electoral en curso, pese a que el proselitismo abierto tiene un período establecido por las leyes que rigen la materia, el más cercano de los cuales está a casi dos años».

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En efecto, algunos partidos se han lanzado -a destiempo- a promover sus proclamas con miras al certamen comicial del 2028. La JCE, en reiteradas ocasiones, ha hecho la advertencia de que las organizaciones políticas, sin distinción, no deben hacer campañas proselitistas a destiempo.

La más reciente advertencia de órgano colegial precisa: «La JCE se ampara en el artículo 78 de la ley 33-18 sobre partidos políticos, movimientos y agrupaciones para quitar las postulaciones a quienes continúen exhibiendo sus aspiraciones a través de consultas previas, anuncios públicos o cualquier otra modalidad de publicidad». Más claro, ni el agua más limpia.

Quizás la violación más «sonada» en violación a las leyes de la JCE, es atribuida a Eglenin Morrison, presidente Partido Camino Nuevo y quien -según lo reveló la JCE- tenía instaladas 100 vallas a nivel nacional con la imagen del senador Omar Fernández a quien promueve para ser candidato presidencial.

En la ocasión la JCE, en advertencia pública, le otorgó a Morrison un plazo de cinco días para que retirara las vallas.  A todas las organizaciones políticas (grandes y pequeñas) que respeten las reglas, que esperen que el tiempo, el que avisa cuándo deben comenzar las campañas proselitistas. Pero que no desesperéis ¡Y que ahora dejen trabajar a la Junta Central Electoral!

 carlosninagomez@yahoo.com

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