Anemia ofensiva golpea a los Tigres del Licey
El equipo capitaleño apenas promedia .178 en el Todos contra Todos.

DIARIO LIBRE
Dionisio Soldevila
SANTO DOMINGO.- Los Tigres del Licey perdieron tres de sus primeros cinco partidos de la serie semifinal del torneo de béisbol invernal de la República Dominicana.
Y lo hicieron anotando apenas 14 carreras en esos cinco compromisos, que incluyeron una blanqueada y dos partidos de apenas una anotación.
Al llegar a la jornada del lunes, el Licey tenía un promedio de bateo de .178, con uno de embasarse de .290 y un miserable slugging de .217.
Los 28 imparables conectados en los primeros cinco compromisos eran 20 menos que su más cercano rival en materia de imparables conectados.
Poca producción
Los Tigres del Licey se encuentran metidos en una profunda mala racha en el plato.
2.8 carreras
promedian los Tigres por partido en el Round Robin.
.178 de promedio
Han conseguido los azules en sus primeros cinco juegos.
28 indiscutibles
han logrado acumular en cinco juegos, menos de seis por partido.
Sus cuatro extrabases (un jonrón y dos dobles) son menos de una cuarta parte de los 18 que tienen los líderes de ese departamento, los Gigantes del Cibao.
Solo cinco jugadores con más de dos partidos jugados tienen promedios por encima de .200 y Nomar Mazara, que batea .286 , con dos remolcadas y seis boletos, es el único que se puede decir que está teniendo un desempeño aceptable en el plato.
Del grupo, Yermín Mercedes es el único que tiene más de un extrabase, con dos dobles, y tiene una línea porcentual de .263/.333/.368.
El jardinero Ramón Laureano se ha quedado fuera de roster en los últimos dos partidos, y no es que estuviera haciendo mucho en el plato, mientras que Hanley Ramírez y Arístides Aquino, otros dos bates de relevancia de la organización, no han estado cerca del equipo desde la temporada regular.
El único cuadrangular del Licey hasta el lunes era el de René Pinto, pero sus demás números ofensivos (.200 de promedio de .250 en porcentaje de embasarse) quedan a deber para un equipo que tiene que comenzar a batear.