Perspectiva

De atropellos y “olfato”

SONDEO/Por Luis Encarnación P.

Colaboración/elCorreo.do

 PERSPECTIVA: A juzgar por el grado e intensificación de inaceptables atropellos y violaciones policiales en perjuicio de ciudadanos, desde reales infractores a regulaciones hasta personas indefensas apresadas y golpeadas en propiedades privadas, todo apuntaba a que el joven director del cuerpo armado tendría los días contados en el cargo y a que—en términos de costo político—el Gobierno de Abinader y del PRM tenían una bomba de tiempo a punto de estallarle en las manos.

Los riesgos y perjuicios generalizados, en deterioro institucional e inesperado retroceso democrático, no podían ser mayores. Ciudadanos desafiando irresponsablemente las normas y a las autoridades encargadas de los controles sanitarios, al tiempo que  estas últimas— con patrullas  y hasta comandantes policiales de protagonistas, como el que fue relevado de la dotación de Boca Chica—interpretando decretos y disposiciones de sus superiores a su manera, sin reparar en violaciones a la ley, a derechos fundamentales y a derechos humanos en que incurrían, incluyendo la negativa a que los apresados hicieran una llamada de rigor para informar a su familia.

Muchas cosas parecían salirse de control, llevando a pensar que ganaba terreno un ambiente nada alentador, incluso para el espíritu de cuerpo en alto que debe primar en las distintas «ramas uniformadas” (¿). Los de gris, pese a los ajetreos e incomprensiones propios de su trabajo en las calles, pudieran sentirse alentados…ya por la peligrosa “soga” que les soltaran, en especial a los del tránsito, o por la mejoría salarial dispuesta por el presidente para ellos. No así los de uniforme kaki o de otros colores.

Por suerte, alguien con olfato político alertó a las “alturas” y vino la respuesta: el comandante en jefe hizo una “visita sorpresa” a la Primera Brigada del Ejército y se dejó caer por los recintos militares de la zona fronteriza, donde “pasó la mano” y habló de aumento y de mejoría. De paso, aprovechó para reunirse con el presidente de Haití, Jovenel Moise, y firmar una declaración conjunta de unos 9 puntos de gran importancia para los dos países que comparten la isla.

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Y ya fuera del paso “positivo” que había dado, el “olfato” del ministro de Interior, Jesús Vásquez, fue de los primeros en advertir el “tufo” en el ambiente. De ahí su Twitter, la reunión con la plana mayor policial y la advertencia de que: ”la ciudadanía debe respetar la autoridad representada en cada miembro de la Policía, ya que es inaceptable que estos sean agredidos”, pero poniendo en claro que “la Policía debe respetar la dignidad de cada detenido”. Y le leyó el protocolo a aplicar (¿).  Encar-medios@hotmail.com

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